· La educación intercultural y multicultural deben de ir ligadas, para favorecer al educando y fortalecer el sistema educativo.
· Es importante desarrollar actividades interculturales, para favorecer el afianzamiento de los valores, para ser aplicados y reconocidos en el desenvolvimiento de los educandos y su entorno.
· Los objetivos de la educación en general, como formar una personalidad y enseñar determinados conocimientos y habilidades, siguen vigentes, sólo que deben ampliarse según las concepciones mayas, para fomentar el mutuo entendimiento y el respeto de las culturas existentes en Guatemala
· Es necesario hacer revisiones y modificaciones a la Ley de Educación de nuestro país, ya que los Principios y Fines en los que se basa no poseen las especificaciones para la implementación de una Etnoeducación e interculturalidad como lo plantean los acuerdos de paz establecidos a partir de la firma de la Paz.
· La práctica educativa debería concretarse en actuaciones encaminadas al encuentro de la identidad y diversidad cultural, comprometiéndonos a un diálogo que nos enriquezca tanto personal como grupalmente, este es sin duda el camino que nos llevará a desarrollarnos como una sociedad más justa cívica y democrática.
· Ceder toda la responsabilidad al contexto educativo es un error, por ello consideramos fundamental la intervención conjunta de los diversos estamentos e instituciones políticas, económicas y sociales en la promoción de valores comunes, que desarrollen verdaderas actitudes interculturales.
· La interculturalidad es el marco en el que se debe llevar a cabo la educación, pero no es su meta, es necesario partir de la cosmovisión de cada grupo étnico y de las necesidades e intereses educativos que desean promover.
· Desarrollar una interculturalidad en la Nación es responsabilidad de todos y todas y requiere del apoyo multidisciplinario e interinstitucional para situar a los diferentes grupos étnicos en posiciones de igualdad, inclusión y desarrollo.